En HagalaU invitamos a un conocedor de Attaque 77 desde sus comienzos para que nos hablara de la relación de este referente del punk rock latino con una de sus casas más queridas, Medellín y su público.  Esta es la historia desde un seguidor que creció con su música.

Por: Rafael González Toro

El primer recuerdo que tengo de la banda es al abrir un sobre del correo que me llegó a la casa en enero de 1991. Al romperlo, el esperado casete TDK de 60 minutos, incluía los trabajos: Dulce Navidad y El cielo puede esperar, los dos primeros discos de una banda que cambiaría para siempre la forma sentir el punk latinoamericano: Attaque 77.

Desde ese momento la cinta pasó por todas las grabadoras que tuve. Como en un sinfín de la banda sonora de esos años, estos dos trabajos tronaron hasta que la grabación sacó la mano de tanto traquear. Si bien las letras retrataban las vivencias de ese cuarteto, creado el 23 de octubre de 1987 en el barrio porteño de Flores, Buenos Aires, toda la esencia de los Ramones, pero esta vez trasladada al contexto latinoamericano, se plasmaba en esos temas.

Con la resaca musical de los ochenta, el bache de comienzos de la década de los noventa y la vorágine de muerte que dejaba el narcotráfico en Medellín, las canciones de Attaque 77 se convirtieron en himnos para muchos jóvenes de la ciudad.

“Demasiado alcoholizado, demasiado abandonado, demasiado descarriado para esta nación.

Yo no voy a ningún lado, la muerte me está esperando, tengo un lugar reservado en el cementerio…

El cielo puede esperar…”.

Tuvieron que pasar diez largos años de muchas cintas, unos pocos acetatos y algunos CD, para ver por fin la muchachada, con algunos cambios generacionales, pudiera, de una buena vez, ver a la banda en Medellín. Ese primero de diciembre de 2001, en el desaparecido Templo Antonia de la vía Las Palmas, Attaque 77 (en una formación sin Mariano Martínez) tocó en un memorable show para una fanaticada que llevaba mucho esperándolos.

“Gracias por el recibimiento. Estamos muy contentos de venir de Argentina a Medellín. Este es nuestro primer show aquí en Colombia. A los que conocen, espero que toquemos los temas que les gustan y a los que no conocen, espero les guste. Attaque 77 de Argentina…un poco de rock”, dijo Luciano Scaglione y acto seguido se despacharon con El cielo puede esperar.

Este concierto fue grabado por el hoy moribundo Canal U y quedó como un documento histórico para la escena de la ciudad que se puede ver completo en:

De ahí en adelante el idilio de la banda con Medellín nunca terminó. Continuó el 28 de noviembre de 2003 en un concierto en el Aeroparque Juan Pablo II, junto a Tr3sdeCoraZón, THC y 911. Dos años después, en 2005, volvieron a tocar con Tr3sdeCoraZón y Popcorn en el Concierto de la Juventud para renovar ese cariño de miles de seguidores. Attaque 77, que ya había girado y triunfado por los principales países de América Latina, también en Estados Unidos y España, encontraba en la escena local el lugar perfecto para volver cada que querían y recibir ese cariño.

Un año después, pude verlos en un memorable show en el Club Alemán de Villa Ballester, en el conurbano bonaerense. Esa noche del 25 de noviembre de 2006, tocaron más de 30 temas ya que la presentación del día anterior, que debía hacerse en el Microestadio de Racing Club de Avellaneda fue suspendido por problemas ajenos al grupo. Entonces la banda decidió juntar los setlist de los dos conciertos e incluir tres temas del EP Pirotecnia autorizada.

Y en 2008, los volví a ver varias veces en la gira de su trabajo Karmagedon, en varias fechas que dieron en los teatros de Flores y Colegiales en la Capital Federal de Argentina. Pero, sin duda, tal vez el show que más recuerdo de esos años fue el que dieron en la localidad bonaerense de Pilar, el 15 de noviembre, en City Show en donde les abrió Tr3sdeCoraZón. Esa fue la última vez que vi a Ciro Pertusi con Attaque 77 y fue, también, uno de los últimos shows de él con la banda, ya que se iría meses después.

El regreso del grupo a Medellín, ya en su presentación de trío con Mariano Martínez, Luciano Scaglione y Leo De Cecco, se dio en 2012, para otra edición del Concierto de la Juventud. Esa noche del 11 de agosto en el mítico y hoy abandonado teatro Carlos Vieco del Cerro Nutibara alternaron con Nepentes, Tr3sdeCoraZón, Rey Gordiflón, Johnie All Stars y La Pestilencia, entre otros. Este fue un show que colmó las expectativas y ante unas graderías llenas, la banda logró satisfacer el apetito de sus seguidores y la sequía de siete años sin cantar sus canciones en vivo en la ciudad.

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Dos años más tarde, otra vez en ese festival, el 10 de agosto de 2014, el intro con Eye of The Tiger de Survivor, acompañado de fragmentos de Radio Insomnio, rompió con el silencio y con la ansiedad de la oscuridad de la noche un Carlos Vieco de nuevo colmado. De ahí la batería empezó a galopar para dejar oír Perfección, ese cover de Legiao Urbana, que en la realidad de América Latina es una canción que está más viva que nunca casi un cuarto de siglo después. Este concierto, grabado de nuevo por Canal U está disponible y puede verse a continuación: 

Hoy, treinta años después del inicio de la banda más importante del punk latinoamericano, y en una coincidencia casi increíble con la fecha de creación del grupo, este 19 de octubre Attaque 77 volverá a Medellín en lo que, es muy probable sea su último show en la ciudad. Tras las declaraciones de Mariano Martínez, del 8 de julio pasado, en donde habló del nuevo disco Triángulo de fuerza, la gira de los 30 años y, además, sostuvo que “treinta años es una buena oportunidad para reflexionar sobre todo lo que hemos hecho. Lo bueno y lo malo. Probablemente, estas son las últimas cosas que haremos como grupo…”.

De ahí que en ese Arena Rock Medellín, en el que compartirán escenario con Los Fabulosos Cadillacs, Mojiganga y Tr3sdeCorazón, en La Macarena, será una buena oportunidad para decirle adiós, en vivo a una banda que trasladó ese sentimiento de los jóvenes de los barrios de Buenos Aires y del conurbano a todo un continente. La misma que desde hoy, con 12 discos de estudio, 4 discos en vivo, 4 compilatorios, 3 DVD, 40 videos y centenares de shows en América y Europa, me genera lo mismo que oí en 1991 cuando después de abrir el sobre de correo y poner la cinta en la grabadora.

Informes y boletería, aquí.