munera.restrepo@gmail.com
“Bellavista Social Club (BSC) busca informar, denunciar y cantar sobre todo lo que está ocurriendo, sin renunciar a la expresión abierta de sentimientos diversos. Procuramos jugar con estribillos, humor negro, sátira. BSC es un antídoto contra la desinformación”.
Este es sólo un apartado de lo que dicen Vito y Medina (fundadores de BSC) sobre cómo se conciben en BSC. En la década pasada, estos dos amigos deciden juntar la experiencia musical que ya habían adquirido en Sociedad FB7 y Niquitown para adelantar un proyecto paralelo a lo que ya venían haciendo.
Luego de múltiples presentaciones y tras producir su primer disco ‘Camino Al Barrio’, estos dos músicos, deciden terminar sus estudios, desarrollar proyectos personales y por eso hacen un alto en el camino con el grupo. Hoy, luego de casi 6 años del cese de actividades, Medina y Vito, acompañados ahora de AmericAfro y Alejo Vélez, vuelven al ruedo a dar lidia y a reivindicar el activismo sonoro que se hace tan necesario por estos días de cumbres, carteles de contratación y leyes arbitrarias como la mal llamada ‘Ley Lleras’.
HagalaU ¡No pase de largo!, conversó con estos músicos que hablaron de su pasado; pero sobre todo, de su presente y futuro en la escena independiente de la ciudad, el país y el mundo.
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Alexander Múnera: BSC es un proyecto que creo va ajustar ya una década de existencia y a pesar de ello muchas personas no saben de ustedes. Para alguien que jamás los ha oído o visto, ¿cómo le describirían el grupo?
Bellavista Social Club: El grupo es una confluencia de influencias musicales diversas, nos gusta mezclar, experimentar, trasgredir esas formas puras, algo “canonizadas”, de los géneros subterráneos. No pensamos la música como algo estático y fijo, sino como algo que evoluciona, se adapta y fluye… por eso rechazamos ser clasificados en géneros. Lo que sí tenemos claro es que renunciamos también a la lógica industrial y comercial que reduce la creación a criterios de oferta y demanda.
Reivindicamos una actitud totalmente subterránea, de relación con comunidades y el movimiento social, no de explotación comercial de un producto cultural. La forma de hacer música de BSC, de todas maneras, se influencia mucho por las formas de creación del hip hop, usamos beats de rap y break beat, drum and bass, siempre con muchos samples, deejay en estudio y en vivo, escribimos estrofas muy largas inspiradas en historias reales, en libros claves para nuestras vidas. Como somos tan desafinados no recurrimos mucho a lo melódico (aunque ahora el grupo estará integrado también por una cantante y un músico multi instrumentista), sino que somos más rítmicos y “rapeamos” casi todo el tiempo, pero con una estética en las letras muy cercana a la irreverencia y la acidez del punk, además del nivel crítico.
AM: BSC siempre tuvo un punto de vista frente a la realidad social muy claro, eso se evidenciaba en las letras ¿cuál era su propósito al momento de componer?
BSC: Nos identificamos mucho con la forma que tiene Fabio Garrido, vocalista de Frankie Ha Muerto, de describir su relación con la música: es un poco catártica y de desahogo. En BSC escribimos porque sentimos una necesidad apremiante, es algo vísceral, decimos las cosas como las sentimos y pensamos, dejamos que salgan las palabras: como evacuándolas. Puede que sea un poco escatológica la descripción pero decimos las cosas para que no se pudran adentro (y para no podrirnos con ellas). Hay un compromiso total con lo que decimos, y ofrecemos nuestra presencia física para quien crea que esas palabras son relevantes para alguna causa, organización social o cultural.
BSC está presente en las coyunturas, en todo lo que tenga que ver con lo que pasa en nuestro mundo local (lo “local” va más allá de las fronteras, mucho más allá de naciones y mapas específicos… Latinoamérica nos supo acoger y sentimos una relación de reciprocidad con eso, con la importancia que le dieron siempre a lo que teníamos para decir). Cuando escribimos una letra, procuramos saber qué está pasando y por qué, en ese momento empezamos a componer juntos, a escribir en colectivo. Con nuestras canciones pretendemos aportar a procesos que se gestan o emergen para reivindicar, generar mayor expresión, organización y movilización. Nos vemos como un actor… un actor con un compromiso.
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AM: ¿Cuáles fueron sus razones para dejar de hacer música como BSC y qué los hizo volver?
BSC: La verdad es que el grupo nunca “se terminó” en términos de haberle dado un punto final. La cuestión fue que Medina y yo no teníamos el tiempo para juntarnos y hacer música permanentemente, decidimos terminar los estudios universitarios, graduarnos, dedicarnos a la vida de familia, a proyectos laborales y personales; en el caso de Medina a ser papá; siempre entendiendo que BSC va más allá de la música.
En los últimos años, desde el 2006 al 2008 la creación fue algo esporádico pero comprometido. En este momento las circunstancias de ambos han cambiado un poco, el trabajo conjunto en otros campos no directamente musicales nos ha acercado bastante y nos ha dado la certeza: BSC es relevante para nuestros mundos y hay gente con la que podemos conspirar para hacer de esta una escena más crítica y radical en su deseo de construir una independencia artística real.
BSC no se detuvo, estaba en pausa, sin embargo, en ese momento de aparente quietud se gestaron proyectos muy valiosos, por ejemplo: el Diplomado Culturas Musicales Callejeras y la participación activa en la Red de música independiente.
AM: ¿Qué tienen pensado para su regreso, es decir, van a seguir con la misma posición ideológica y sonido o habrá cambios?
BSC: La música, como decíamos antes, fluye, así que siempre habrá cambios. La posición ideológica cambia también, se cuestiona, se desmorona, se deconstruye y se rehace, no respondemos a un credo o a un discurso fijo, mucho menos a partidos políticos u organizaciones que limiten nuestra manera de pensar; mantenemos una desconfianza y rechazo con ciertas maneras de la institucionalidad, con las instancias que mantienen la guerra y la represión.
BSC logra que nos dejemos impresionar por el mundo y respondemos ante lo que vemos. Somos plenamente conscientes de nuestro contexto, no nos sentimos seres especiales e iluminados, así que eso seguirá siendo parte de nuestra propuesta: seguiremos siendo un grupo des /ubicado en su contexto y que siente que tiene una responsabilidad ética con él y con las comunidades de las que nos sentimos parte.
En los últimos conciertos de BSC incorporamos el elemento audiovisual con la participación de un VJ local en nuestro show, en esta nueva etapa queremos afianzar ese elemento con un nuevo integrante del grupo que es muy sensible y comprometido con la gestión independiente, con propuestas pedagógicas desde la música, además es músico, DJ y VJ, se trata de Alejandro Vélez. Además de eso, en vivo queremos incorporar instrumentos de percusión, muchas máquinas, marimba, teclados y voces melódicas… Se trata de dos integrantes de la familia que tienen una formación musical mucho más sólida que la nuestra y que nos permitirán enriquecer el universo musical de BSC, tanto en la voz melódica como en la utilización de instrumentos en vivo y en las influencias musicales criollas, ellos son: Yennifer Chaverra y Sergio Giraldo de Americafro.
AM: Una vez Vito me dijo que la música de BSC se podía descargar, para la gente que nos lee, esto dónde se puede hacer. Y para quienes deseamos discos físicos, hasta cuándo nos va tocar esperar.
BSC: El 1er disco, “Camino al Barrio”, está disponible para descarga gratuita en este link:
http://www.mediafire.com/?3p7tvrp4whpk5e5
El próximo disco es sólo un sueño que se ha vuelto embrión. Ya tuvimos la experiencia con el primer disco, incluso con otros proyectos en los que participamos, de anunciar y anunciar un lanzamiento que siempre se pospuso. No queremos volver a hacer lo mismo con BSC, es un asunto de respeto por el público a quien le interesa el grupo; somos conscientes de las limitaciones y ventajas que implica ser una banda independiente. La gestión de la música ha cambiado muchísimo en poco tiempo y nosotros hemos decidido estar por fuera de lógicas que cuestionamos, decidimos no tener mecenas o patrocinador, tampoco contratos con un sello.
BSC tiene integrantes que al haber renunciado a “vivir de la música” por no querer convertirla en producto comercial de una industria cultural, se ven obligados a trabajar en otras cosas para sobrevivir, lo cual implica unos ritmos y unos tiempos un poco irregulares, a su vez estrategias muy propias para lograr un buen esquema de gestión, acorde a nuestros principios y objetivos. Lo que si esperamos que suceda con prontitud es nuestro regreso a las tarimas, pero tampoco tenemos fechas al respecto, queremos viajar, tocar en muchos municipios y ciudades, hacer la segunda gira por Suramérica… Tenemos muchísimas ideas, propuestas de agendas. En los años de pausa participamos en canciones de Pizko, MC de Francia, tenemos una canción con Ewok, rapero sudafricano invitado en el 2011 al Festival Internacional de Poesía, muy pronto podrán escuchar una canción realizada con Neuma. BSC está presente y conectado.