Víctor García: pionero de la producción musical en el rock de Medellín. 1ª Parte

En HagalaU hablamos con Víctor García, un personaje esencial en la construcción del rock de Medellín gracias a bandas como Nash, además de su oficio como productor en proyectos como Estados Alterados y Masacre, entre otros. Esta es su historia.

La década de los 80 fue uno de los momentos más importantes para la escena rockera de Medellín porque significó algo así como la expansión del virus (el rock y la proliferación de bandas),  proliferación de bandas en su mayoría, inscritas en los géneros punk y metal y que, a pesar de la precariedad en cuanto a instrumentos y recursos para la producción musical, pusieron sus almas y corazones para hacer lo que les gustaba (aún algunas de ellas lo hacen, hoy en día), creando así un sonido característico que sólo salía de las montañas de ‘Medallo’.

Dentro de esta escena, apareció Víctor García, un vocalista, guitarrista y tecladista proveniente de una familia de músicos, quien, desde los 12 años, había dado sus primeros pasos en la música tocando heavy metal y rock progresivo con ‘Sobredosis’, hasta que, años después, se reuniría con Gustavo Corrales (guitarrista), Hernán Cruz (batería) y Sigifredo Álvarez (bajo), todos con experiencias previas en otras bandas y como profesores de música, para formar lo que ellos denominaron una ‘súper banda’, que llamarían ‘Nash’, comenzando con covers de bandas como Uriah Heep y Journey.

“En ese momento, realmente no había bandas proyectando tanta versatilidad musical y la imagen que teníamos al mismo tiempo, esa imagen de los ‘Rock Gods’ con el pelo largo y peinados tremendos, estábamos explotando un poco de eso y de la puesta en escena, era una banda bastante dinámica y a la gente le pareció maravilloso”, recuerda Víctor de su etapa en ‘Nash’, con quien grabó, en la disquera Discos Victoria, tres súper sencillos (formato en el que se grababa en ese entonces, en un disco de 45 revoluciones por minuto), con tres canciones cada uno y las cuales fueron bien reconocidas en las estaciones de radio y los canales de televisión, recordando especialmente su presentación en Espectaculares JES, programa del famoso presentador Julio Sánchez Vanegas, y el éxito de su canción inédita, Secret Hideaway, en las emisoras.

https://www.youtube.com/watch?v=X79Mm4LiSks

Mientras buscaba plasmar el sonido que tenía en su mente junto con sus tres ‘supermúsicos’ de Nash y con Discos Victoria, sentía que en todas las producciones siempre quedaba faltando ‘el centavo para el peso’, para que quedara exactamente como se lo imaginaba, y esa búsqueda de la perfección sonora lo llevó a convertirse en uno de los productores más importantes de la escena musical colombiana en la década de los ochenta. Así recuerda sus inicios en la producción musical:

“Llegar a ser productor casi siempre es un accidente; en la búsqueda de saber cómo mejorar mi propio sonido, empecé a estudiar, a adquirir equipos, a hacer pruebas, hasta que fui poniendo pequeños estudios caseros para hacer demos de mis canciones, que sonaban a veces mejores que los que salían de las disqueras y la gente empezó a notar eso. Nadie se imagina con los equipos que grabamos el Kraken II, por ejemplo, es casi como de un Grammy de tecnología por la forma en cómo hicimos sonar ese disco, con lo que había, ¡es impresionante! Pero las ganas de hacer las cosas y el entusiasmo de todo el mundo, nos llevaron por esos buenos caminos; de ahí que la gente empezara a decir: “Víctor García fue el que nos ayudó, él es nuestro productor”, realmente lo que hacía era ayudarles a traducir lo que tenían a las máquinas, y de un momento a otro me di cuenta que, pues sí, es como lo que llaman un productor”.

Así como lo hizo con Kraken, también fue el productor de bandas icónicas en la historia del rock colombiano como Masacre, Ekhymosis y Estados Alterados, con quien repitió recientemente en la producción de su reciente disco, “Intruso Armónico”.


Víctor García fue el productor del álbum “Requiém” del grupo de death metal colombiano, Masacre

“Increíblemente, la consola con la que grababa era para tocar en vivo, una Peavey, tenía también una grabadorcita Fostex de ocho canales con un Dolby C, en ese momento era de lo mejor para capturar el sonido en cintas sin tanto ruido, pero le daba una característica bastante detallada y a su vez, enriquecía la textura de la música; y como no nos quedaban muchos canales, pues recurríamos a computadores, en ese momento estaban los primeros computadores musicales, como el Atari 1040, con una memoria RAM de ¡un megabyte! Es increíble, en un megabyte lográbamos meter toda la información, y nos ayudábamos también con las interfaces MiDi, que son protocolos musicales que disparan impulsos para los sintetizadores, por decirlo así, pero no es una grabación de sonido como tal. Era un marco técnico bastante complicado para la época, pero lo hicimos funcionar al 110% para hacer estas producciones”, es lo que recuerda Víctor de la precariedad técnica con la que lograron grandes producciones.

Luego de todo este recorrido y de varios logros como productor musical, Víctor García viaja a Los Angeles a continuar con su carrera, siempre de la mano del sonido. En la segunda parte de nuestro artículo, les contamos cómo  llegó al norte del continente y el giro que dio su carrera, hasta llegar a lo que es hoy en día en la industria cinematográfica.

Le recomendamos: “Víctor García”: pionero de la producción musical en el rock de Medellín. 2ª Parte

Compartir este contenido

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll to Top