Han pasado más de 30 años de historia de rock local y si bien el circuito se ha fortalecido, queda algo claro: ¡aún falta madurar y lograr que ese circuito sea autosostenible!
Han crecido los medios y programas como HagalaU o Universo Centro, se han potenciado los festivales como Revolución sin muertos o Festival de Rock de la Comuna 6, bandas como LA doble A, Masacre, Puerto Candelaria, Providencia y Witchtrap, entre otros, se presentan en otras ciudades de Colombia y en el exterior. Con una característica: ¡todos por su lado!
Por eso, es la hora de organizarse para lograr la gestión de recursos con los Ministerios, para incidir en una ley de visas y de seguridad social para los músicos, entre otros puntos claves a la hora de profesionalizar y dignificar este ejercicio; pesan más las decisiones de 2000 músicos unidos que la de un grupo musical de 10m integrantes. ¿O no?
La pregunta es: ¿están preparados los actores del circuito para agremiarse y pensar no en beneficio particular sino en bienestar común?