Altavoz cerró su decimoquinta edición el pasado lunes 12 de noviembre con presentaciones llenas de energía y vitalidad a cargo de Él mató a un policía motorizado, Radio Calavera, The Adicts, P-Ne, La Doble A y Papa Roach, sin dejar de mencionar los increíbles momentos que se vivieron durante todo el fin de semana en los shows de Bad Manners, Doctor Krápula, Ángeles del Infierno, Hepcat, La Sinfóniska, 4to demente y muchas más.

Katerine Chavarriaga // @KatyChC|| 14 de noviembre de 2018

Han sido 15 años en los que el festival le ha apostado a la cultura, la convivencia y la diversidad; y cada año se ha ido fortaleciendo de manera que el público se sienta más allegado a él. Pero después de tantos años y de tantas metas cumplidas, ¿cuál es el reto que tiene el festival de cara a las futuras ediciones? ¿Qué ha dejado de hacer que se pueda implementar? En HagalaU hablamos con algunos asistentes del festival, entre periodistas, gestores culturales, músicos y organizadores y esto fue lo que nos dijeron:

Lo que debe pasar básicamente es que el festival tiene que estar conectado con las músicas del mundo, con las nuevas tendencias sonoras que están imponiéndose en el resto del planeta, conectar la ciudad y a los músicos con otros sonidos. Es muy difícil porque puede ser costoso traer bandas y grandes espectáculos a nuestra ciudad, pero netamente el festival ha venido desatrasándose, pagando viejas deudas con grupos que alguna vez fueron muy famosos y que alguna vez deberían haber estado auí; es un proceso lento y costoso, pero por lo que he visto, yo que he estado desde la primera edición, la evolución es impresionante, el conocimiento que se ha ganado a través de estos años nos garantiza tener un festival de primer nivel, nada que envidiarle a los eventos que se realizan en otros lugares del mundoJavier Rodríguez-Director 95.9 Cámara FM.

El reto del festival Altavoz es seguir creciendo, no retroceder, y que estos 15 años realmente sigan siendo como el punto de partida en crecimiento,  el festival a futuro debe involucrar más los procesos de generación de públicos, incentivar el tema de la circulación de los grupos que pasan, que ya se ha hecho con convenios y con varios acuerdos conotros festivales, pero lo más importante es que siga dando pasos adelante y no vaya a retroceder porque este ha sido el punto más alto del festivalLeón Vélez,  bajista de la agrupación Mística.

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El reto del festival es mantener esta vara bien alta, seguir ayudando a las agrupaciones con talleres a lo largo del año, porque no solo es el concierto internacional. Además, seguir con esta labor logística de montaje tan increíble que han tenido hasta ahoraFrancisco Ortiz, de Medellín Rock City y Templo del Rock.

The Adicts

Creo que después de 15 años, el reto de la ciudad de Medellín es llevar a Altavoz a los barrios y las comunas, es establecer una red de trabajo con unos encuentros creativos que transversalice con la política pública de economía creativa y de emprendimiento. Es transformar y hacer de Altavoz un evento permanente, una apuesta de ciudadAnalía Suárez, fundadora de Arte Vivo.

 

El reto después de estos 15 años de Altavoz es seguir convocando cada vez más jóvenes de la ciudad, que más muchachos que están en sus casas vengan al festival y pasen la voz a los adultos y a los niños, que esto se vuelva un parche familiar y desde temprano tenga buena asistencia. Ahí también está el gran reto de cuál es espacio o cuáles son los lugares para hacer este tipo de eventos en la ciudad, porque sé que Altavoz puede convocar mucho más, pero los espacios en Medellín nos pueden limitar un poco, por lo que ahí el reto no es solo para altavoz sino para la ciudad: proponer y permitir otros espacios que puedan convocar una buena cantidad de públicoDaniel Buitrago, de Indub Music.

Creo que es muy difícil decir cuáles son los retos porque las últimas dos ediciones aquí en la cancha del Cincuentenario han sido muy grandes en temas de espacio, infraestructura y organización. Creo que el reto más allá de todo, empezaría con presentar propuestas más actuales, es decir, bandas más ‘mainstream’, que podamos tener un artista que quepa en un Estéreo Picnic o Lollapalooza, en un buen nivel. En este caso por ejemplo tenemos artistas como The Adicts o Papa Roach que tuvieron una época anterior a su augeAndrés López, director de Rockal.

El reto del festival es encontrar otro espacio dentro de la ciudad que permita una capacidad locativa que le dé seguridad y que permita un diseño de producción técnica mucho más amable porque estoy seguro que cada vez serán miles y miles las personas que quieran asistir y sobre todo que cuidemos la política pública, cuidemos este festival que es de todos y todasJuan Carlos Sánchez, baterista de Nepentes y director del Teatro Pablo Tobón Uribe.

Diría que el reto de Altavoz es tratar de reinventarse en sus formas, encontrar otras maneras para fortalecer el espacio de Ciudad Altavoz que ha venido creciendo y empezar a darle más fuerza a esos intercambios que tanto nos permiten a las bandas de Medellín poder estar en otros lugares. Creo que el camino para que el festival como programa de crecimiento para los artistas en Medellín tiene que ir hacia ese lado, el tema de la circulación internacional, que se siga fortaleciendo; y aparte de eso, seguir con la formación de los nuevos chicos, arrancar otra vez con todos los programas de formación que se han venido haciendo a través de Altavoz Lab, trabajándoles para que sigan creciendoGustavo Álvarez, de Cocorota Inc, La Doble A y Militantex.

¿Y usted cuál cree que es el reto del festival Altavoz después de estas 15 ediciones?

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Foto: Yojan Valencia

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