Reseña de un concierto donde el canto retumbó en el Teatro Metropolitano. Así se vivió el concierto del “Cuarteto de nos” en Medellín el 16 de septiembre de 2017.
Colaboración especial de Francisco Ortiz para HagalaU
El Cuarteto de nos y su Apocalipsis Zombi pasaron por tierras paisas en Medellín y fue un éxito más que rotundo. Se le dio una cachetada no tanto inesperada sino más bien categórica al concepto del “ya los vi en (escriba aquí uno de los tantos festivales de entrada libre subsidiados por las alcaldías o los presupuestos públicos en las principales ciudades del país)”.
Y es que los desafío a que piensen y mencionen que otra banda internacional de rock en español respetada por su arduo trabajo y trayectoria –más de 3 décadas de existencia y sobrepasando la decena de trabajos discográficos-, que cuente con un soporte de distribución de su música por dos grandes sellos disqueros en los últimos 10 años (Warner Music y Sony Music) y que usualmente no figura en las emisoras comerciales o canales de videos tradicionales en televisión -si es que éstos todavía presentan videos- que lleve más de 1.500 personas a un evento donde se destaquen como cabezas de cartel o sólo se presenten ellos p-a-g-a-n-d-o una boleta en los últimos 3 años?
Y es que los uruguayos han ido amasando una fervorosa camada de seguidores desde mediados de los dos mil con un par de shows en 2 festivales importantes en la capital de nuestro país y haciendo su debut a nivel masivo en Medellín en el Festival Altavoz 2012. Pero es principalmente a través de la organización de la banda Tr3sdeCoraZón con su ex Festival de la Juventud y con sus dos últimos conciertos individuales en el Teatro de la Universidad de Medellín y el de este mes de septiembre en el Teatro Metropolitano –donde fueron los productores- que hemos sido testigos del poder de convocatoria y de la delirante efervescencia que estos cinco “catanos” y su más joven teclista, bajista y hasta rapero evocan en tarima en unísono con el público paisa.
Ni los mismos integrantes se esperaban que los asistentes corearan desde el arranque dos de las nuevas canciones extractadas de su nuevo álbum que le da también nombre a la gira “Apocalipsis Zombi” y que fue interpretada precedida por “La Bestia”. Sin dejar que el impulso palpado en el recinto decayera tan siquiera un minuto, el dúo de los memorables e idolatrados temas de “El hijo de Hernández” y “Ya no sé qué hacer conmigo” se dejaron sentir y cantar por todo el lugar, ya los más enérgicos ubicados al frente de la tarima e inclusive en los corredores separadores de las lunetas y plateas; pues fueron muy pocos los que seguirían el recital sentados o incluso en sus sillas correspondientes teniendo allí la oportunidad de estar más cerca.
El Club de Fans “Colombia de nos” recibió al grupo en el Aeropuerto José María Córdoba de Rionegro, Antioquia.
Santiago Tavella, el carismático y distendido bajista del Cuarteto, el cual es el segundo compositor transcendental de la banda, tendría sus momentos protagónicos en la voz principal en las canciones “Enamorado Tuyo”, “Whisky en Uruguay (o en Medellín como cambiarían la letra)” y “Pobre Papá”. Y como es costumbre, puso al público a vitorear sus pasos de baile, los cuales en forma similarmente jocosa, los concurrentes aprobarían desde sus asientos con gritos y silbidos.
El humor, la sátira, la originalidad y variedad lírica son aspectos que son parte vital en un concierto de los rioplatenses y ésto se dejó ver a lo largo del espectáculo, estando ellos más que agradecidos con sus seguidores. “No llora”, “Buen día Benito”, “Roberto” y “Mírenme” también fueron pistas que promovieron el desenfreno y pasión extrema al joven y variopinto auditorio. Hace rato no escuchaba vociferar con tanta fuerza a una sala por un “encore”, o la clásica “otra” para que los gauchos salieran de nuevo, pues faltaba uno de sus mayores éxitos: “Yendo a la casa de Damián”, anticipada por “Miguel gritar”.
Así es como se dio fin al recital pasadas las dos horas de concierto y las 10 de la noche. Que agradable es seguir a una agrupación con cada lanzamiento discográfico que componen y lanzan y verlos en diferentes lugares y momentos de su carrera, además de apreciar a un público joven quienes se hacen partícipes de la movida cultural de la ciudad comprando sus entradas y revitalizando las ganas de seguir haciendo eventos de rock en nuestra compleja urbe de mayor gusto hacia otras tendencias musicales.