El músico y productor argentino Tweety González trabajó a sus 20 años como productor del álbum “Giros” de Fito Páez, ese fue su primer disco en ese rol pero a partir de ahí ese viaje sónico ha sido excitante y sin tregua.
En su larga lista como productor aparecen biblias de la música y pesos pesados como Gustavo Cerati, Soda Stereo, Bersuit Vergarabat, Kevin Johansen, Shakira, Sentimiento muerto, además de conjugarse en distintos discos de Fito -incluido el citado “Giros”- como “El amor después del amor“. En Colombia, también guió el sonido de dos álbumes de Superlitio, el Tripping Tropicana de 2003 y Nocturna de 2014. Y como dato clave, produjo una placa de Estados Alterados en 1998 y que nunca se publicó.
En su sitio web, Tweety se presenta así: “Nací en Buenos Aires en 1963. Mis padres me contaron que no hablé una palabra hasta los dos años de edad en la que señalé un parlante y dije: “Phillips”. Esa fue mi primer palabra. Comencé a tocar el acordeón a piano de mi madre a los 4 años, luego la percusión, la flauta dulce y finalmente aprendí piano.
Mi carrera como músico profesional comenzó en 1983 en las jam sessions que se armaban los domingos en Jazz & Pop. Allí me mezclé con toda la crema de la época del jazz-rock argentino y conseguí mi primer trabajo como tecladista de Celeste Carballo, que en ese momento era la nueva musa del rock argentino.
En los 80’s me consideraron ser uno de los primeros precursores latinos en el uso de MIDI y su integración a los shows en vivo. En 1985 Fito Páez me convocó para formar parte de su banda y al poco tiempo produje su segundo disco llamado “Giros”. Esta fue mi primera producción, luego vinieron más discos gloriosos como “Ey” y “Ciudad de Pobres Corazones” a los que le siguieron mis trabajos con Viuda e Hijas de Roque Enroll, Fabiana Cantilo, La Torre, Liliana Herrero, entre otros”… Y claro, su viaje sigue.
Este grande de la música ha acumulado múltiples aprendizajes que van desde grabar con cuatro canales hasta… ¡Partamos de ahí! En el programa argentino “Los visionarios”, expuso pistas que parecen obvias pero que son elementales para el circuito de la músical colombiano. Tomen nota:
– Buen gusto
– Paciencia.
– Un ego controlado (entender que el disco es de otros, que son esos otros los que salen en la carátula)
– Poder trabajar con presupuestos grandes o pequeños; saber acomodarse.
– Seleccionar muy bien las canciones y saber escoger lo que no sirva. Esa es la mitad del secreto.
– El éxito está en poder tener un buen disco. Lo que pase después, es el suceso. Hay que encontrar el nicho de la banda.